En este artículo contamos sobre las diferencias entre deseo, excitación y orgasmo. Si bien están íntimamente relacionados, estos tres conceptos se conectan con la sexualidad cada uno desde una perspectiva diferente, por lo cual es importante destacar tanto lo que tienen en común, como lo que es diferente.
Esto te puede ayudar a entender mejor lo que puedas estar viviendo en tu sexualidad, además de derribar algunos mitos al respecto. Así también, te invitamos a buscar siempre ayuda profesional para obtener la mejor orientación y beneficios para tu caso particular:
Contenidos:
Deseo
Con el deseo nos referimos principalmente a lo que entendemos por la libido, que abarca pensamientos, emociones y sensaciones que evocan el placer y que despiertan las ganas de tener sexo. Esto ya sea por un estímulo externo que nos activa este estado o por algo interno que se puede dar de forma espontánea.

El nivel de deseo está muy conectado tus emociones, tu autoestima, estado de salud, hábitos, descanso, alimentación y más. En síntesis, podemos sentir más o menos deseo dependiendo de múltiples factores.
Derribando mitos del deseo:
- Cuando sentimos deseo no implica que vayamos a tener sexo, no es obligación.
- Sentir deseo no implica que haya excitación sexual (ver próximo título)
Excitación
Aquí entra en juego la respuesta sexual, que moviliza una respuesta corporal, mental, emocional y energética. Por una parte hay cambios en el ritmo cardíaco, flujo de la respiración, mayor circulación sanguínea en diferentes zonas, no solo genitales, sino también rostro, pecho, manos; hay una respuesta hormonal, nos sentimos mejor y con más energía.

Aquí puedes sentir placer con diferentes prácticas sexuales que van desde lo más sutil con caricias y besos a lo más fogoso con las fantasías de tu preferencia.
Derribando mitos de la excitación:
- La excitación aumenta de forma gradual y progresiva, no es instantánea ni inmediata.
- La erección no es sinónimo de excitación, puede haber deseo y excitación sin erección.
- Además, no todo se trata de penetración, hay infinidad de formas de disfrutar.
Orgasmo
Es la etapa cumbre o cúspide de la excitación, donde se siente más placer y es una experiencia donde se libera tensión física, emocional y energética. Cada persona lo experimenta de su forma particular, pero hay contracciones involuntarias del cuerpo, eyaculación y otras manifestaciones de la voz, la energía y el alma.

Llegar al orgasmo requiere de relajación, tiempo, conexión, confianza y dejarse llevar. No es algo automático que llega por simple estimulación genital. Aquí el autoconocimiento, saber qué te gusta y cómo, es clave para poder disfrutar más plenamente de un encuentro sexual.
Derribando mitos orgásmicos:
- Orgasmo y eyaculación son fenómenos distintos, puede haber orgasmo sin eyaculación y eyaculación sin orgasmo.
- No es una meta, a veces hay mucha presión con esto y es importante disfrutar del encuentro en tiempo presente, no pensando en el futuro.
¿Pudiste aprender cuáles son las diferencias entre deseo, excitación y orgasmo?
Si bien hay mucho para detallar y aún quedan muchos mitos, lo importante es que este esquema te ayude a entender mejor tu sexualidad y a identificar cosas que puedes mejorar, donde podemos orientarte y acompañar tu proceso.